Diego Rivera, El agua, origen de la vida, 1951, 272 m² poliestireno y solución de hule/muro directo, Cárcamo de Dolores.
Marcela Armas, Exhaust, 2009, 6 autos, gasolina, contenedor de plástico, gas de combustión y puente, registro en video.
Gilberto Esparza, Cultivos, Plantas Nómadas, 2008-2014, México-Perú.
Vicente Rojo, México bajo la lluvia 106, 1982, Acrílico sobre tela, Museo Universitario de Arte Contemporáneo.
Fanny Rabel, El naufragio, 1983, técnica mixta sobre tela, 124 x 202 cm., Colección Paloma Woolrich.
Helen Escobedo, Federico Silva, Hersúa Manuel, Mathias Goeritz, Sebastian, Escultura circular, 120 m. phi., 64 módulos triangulares sobre un anillo circular de piedra que contiene mar de lava, Ciudad Universitaria, 1979.
Carla Rippey, Mujeres pensando en meteoritos de la serie Mujeres, fuego y objetos peligrosos, transferencia sobre papel Kozo, montadas sobre cajas de latón vintage, 11 elementos, aprox. 102 x 102 cms. en exposición, 2010.
La técnica
moderna
y tres elementos
de la naturaleza
Formación de una urbe
AGUA
AIRE
TIERRA
Ariel Guzik, Cámara Lambdoma, intervención
sonora, 2010
La técnica moderna y tres elementos de la naturaleza. Formación de una urbe
A partir de tres elementos naturales se recuperan obras que, de distintos modos, albergan la potencia para detonar reflexiones en torno a la cuestión de la técnica y de la relación que guarda con la naturaleza y con la condición humana.
La exposición está dividida en secciones de acuerdo con el elemento natural central de cada obra, agua, aire o tierra. No obstante, en la parte inferior de la exposición, las obras se juntan sin un orden definido. Esto permite poner en relación y enfrentar unas obras con otras. La elección de éstas pretende poner en diálogo obras de muy distinto carácter y de muy distintas estructuras mediales. Esto con el fin de que el espectador participe en la reflexión sobre las posibilidades y límites de cada forma que toma el discurso artístico, pues cada uno apela a distintos órdenes de nuestra sensibilidad, y a distintos modos de decir algo respecto a la relación: humano – técnica – naturaleza. De este modo, la organización no responde a un orden cronológico o estilístico sino temático, lo cual permite desvelar interpretaciones renovadas de las obras en cuestión.
AGUA
• Diego Rivera, El agua, origen de la vida es un mural subacuático localizado en el interior del edificio que conmemora el final de las obras del Sistema Lerma, el cual se proyectó en 1941 como una solución hidráulica de abastecimiento de agua dirigida al noroeste de la Ciudad de México. El sistema culminaba en la actual zona de Chapultepec. Este enclave de aire limpio, lugar de donde brotan las venas de agua que abastecen a la ciudad, al ser mirado desde la realidad actual del río Lerma, pone en cuestión el sentido y destino de las soluciones estatales técnicas a la situación de agua actual.
• Gilberto Esparza, de la serie de obras Cultivos, Plantas Nómadas supone la creación de una especie autónoma, pero parasitaria de la huella humana de contaminación del agua. Este ente restaura a pequeña escala daños ecológicos, pues restituye la energía que toma de la tierra. Su ciclo metabólico le permite biodegradar los deshechos orgánicos y sustancias tóxicas que almacena del agua contaminada que succiona. Mejora la calidad del agua para proporcionársela a las especies vegetales que habitan en ella.
• Vicente Rojo: Es un lienzo de largo formato. Es una obra inspirada en la mirada y la contemplación de la naturaleza. En Tonantzintla, Puebla, Vicente Rojo observó la lluvia caer sobre el valle de Cholula. Es una composición basada en líneas diagonales imbricadas que recorren la base total del cuadro. Las líneas, a su vez, se conforman por triángulos o manchones. El juego geométrico de esta obra de arte óptico radica en poner de relieve la sensibilidad del ojo y su puesta en movimiento a partir de un artificio técnico-artístico. Éste último va de la imagen al ojo, desvelando la ingeniería técnica de la propia mirada y de la condición técnica del propio cuerpo, haciendo aparecer así, una metáfora emotiva de la naturaleza.
• Fanny Rabel, El naufragio. Es una obra que ilustra los resabios del movimiento muralista, pero que actualiza y re-articula su concepto. Desde el interior de su habitación, una mujer mantiene un rostro firme ante la inminencia de la muerte. Frente a la mujer, un revolver le apunta directamente. Tecnología humana para la muerte; por otro lado, el mar inunda el espacio, colándose por las ventanas hacia un interior sin salida. El tono pintoresco de su obra no esconde la violencia de estar frente a aquello que hace la vida humana, vulnerable. La propia creación e invención humana, y la inmensidad de la naturaleza.
AIRE
• Ariel Guzik: En palabras del artista, la Cámara Lambdoma fue hecha para evocar de nueva cuenta la presencia del agua en el recinto del Cárcamo. A través de un sensor de la sonoridad del reflujo del agua, de su caudal y del ruido térmico; de una torre de señales meteorológicas; y de los juegos de pipas que integran el órgano de armónicos y subarmónicos, la Cámara Lambdoma es un instrumento sensible a las señales que determinan los matices en los coros del órgano, de tal forma que las nubes, los cielos nublados, el viento, la lluvia, la llovizna, el cenit, el crepúsculo y los movimientos telúricos producen, en los acordes de la cámara, acentos y tensiones.
• Marcela Armas: Exhaust hace aparecer lo invisible en el ámbito de la ciudad. Exhaust es un juego de palabras. En inglés significa tanto exhausto como escape (de los vehículos). La pieza hace visibles los contaminantes que ocupan un lugar en el espacio de la ciudad. El contenedor es la réplica de una gran columna de la autopista que aquella sostiene desde abajo. El pilote de plástico se infla con los gases contaminantes expelidos por seis vehículos puestos en marcha. Se pone en juego, también, el peso del aire. Los combustibles fósiles y la producción inmensa de residuos invisibles sostienen el mundo urbano en que vivimos.
TIERRA
• Helen Escobedo: Espacio escultórico. Roca volcánica amalgamada hacia la zona sur de la Ciudad. La explosión volcánica del Xitle ha inundado todo con esa masa carente de forma. De esta amalgama de piedra, surge un perfecto anillo de piedra que imita lo que la Naturaleza produce por sí misma: la exactitud geométrica de las formas. Es el encuentro de formas geométricas endurecidas con las manifestaciones orgánicas de la naturaleza.
• Carla Rippey: La noción tierra se ha extendido. La articulación de esta obra se realiza a partir de una búsqueda azarosa en Google de las palabras mujeres, fuego y objetos peligrosos, tres conceptos que aglutinan lo que un pueblo aborigen australiano tiene por la unidad de un solo género. Un objeto técnico, vinculado con las redes y conexiones satelitales que hoy inundan el espacio exterior, media nuestras relaciones de conocimiento, pensamiento y creación. Espacio exterior y meteoritos. Transformación del concepto de Tierra y del propio elemento tierra, ahora vinculado con objetos extraterrestres, a los cuales sólo hallamos al nivel del suelo.
Esta exposición nos devuelve la pregunta por aquello que media entre lo humano y la técnica y entre lo humano y la naturaleza. Las piezas seleccionadas desvelan el propio carácter ambivalente, así como las contradicciones, de la técnica y de la naturaleza en tanto que guardan una relación con la condición humana.
Margarita Escalera